En La Mirada Indiscreta te sentirás como un niñ@

La Mirada Indiscreta tiene el placer de comunicar que estrena su primer anuncio. En este video de 40 segundos, se pretende mostrar el papel clave que la cultura y el deporte juegan en cualquier momento de la vida, pero especialmente en situaciones especiales como las que estamos atravesando.

La campaña consta de un video y varias fotos. El protagonista es Marcos, un niño de once años que lleva desde los siete ejerciendo de modelo. Su madre le considera guapo - que raro en una madre - , observador, amigo de sus amigos y tímido, pero también exigente. Ha participado en anuncios para televisión de marcas como Milka, Rhinomer, Orange, o Pescanova. También aparece en el anuncio de Navidad 2018 del Real Madrid. También ha salido en catálogos de marcas como El Corte Inglés, Hipercor, Carrefour, Munich, Timoneles, María Lápiz, Multiópticas o El Pozo. También sale en el programa Tabú de Jon Sistiaga en Cero, de Movistar+. Además, aparece en los créditos de Desaparecidos, serie de Amazon Prime Video.

Su currículum es uno de los motivos para ser el elegido a la hora de protagonizar la campaña. Además, se ha pensado en la importancia que tiene la cultura y el deporte en el desarrollo integral de cualquier persona, especialmente en la infancia y en la adolescencia. También influye lo mucho que le gusta el deporte a Marcos, y lo profesional que ha demostrado ser en la realización de este proyecto casero.

Y digo casero porque los videos han sido grabados por su madre. De esta manera, hemos minimizado los riesgos de contagio por coronavirus. Para que la coordinación haya sido buena, ha sido indispensable el trabajo de la representante del menor, Mencía, de la agencia Perfil Management.  

Además, en cumplimiento de la normativa vigente, se ha firmado un contrato de cesión de derechos con la madre y la agencia del menor. De este modo, en febrero se tendrá que eliminar todo el contenido audiovisual en el que aparezca Marcos.

El vídeo que van a ver a continuación ha sido editado por Moisés Camuñas, excelente periodista y mejor persona.

Además de este video, la madre también ha realizado varias fotos. Cada vez que se suba un post, una imagen de Marcos con una tablet, móvil u ordenador aparecerá en mis redes sociales. Siempre dentro de este mes de contrato firmado. Aquí tenéis un aperitivo:

Si eres fiel a las tradiciones, ponte cómodo y mira la web desde el ordenador.

¿Tienes un apretón y no quieres dejar de ver La Mirada Indiscreta? Tranquilo, también se puede ver en la tablet.

¿Qué tienes que hacer un pis? No pasa nada, con una mano puedes ver La Mirada Indiscreta en versión móvil.

Una vez más, agradecer a Marcos y su madre el trabajo realizado. También a Mencía, de Perfil Management, por todo el asesoramiento y apoyo recibido. Y por supuesto, a Moisés, el crack que ha realizado el video. Ya sabes, si te gusta la cultura y el deporte, no lo dudes y súmate a La Mirada Indiscreta! 

Nuestra bandera es Rafa Nadal

 

Hoy es 12 de octubre: Día de la Hispanidad, de la Virgen del Pilar... Y de Rafael Nadal Parera. Este tenista balear es el mejor deportista español de todos los tiempos. En la fecha de la Fiesta Nacional de España, habría que hacerle un acto de homenaje a un tipo que es capaz de conseguir lo imposible: que los españoles nos unamos para ensalzar su enorme figura.

Porque Rafa representa lo mejor del deporte: el esfuerzo, la superación, la humildad y el talento. Además, su profesionalidad está dentro y fuera de la pista, delante y detrás de las cámaras, on y off the record. es más, encoge el alma ver cómo se sigue emocionando con cada triunfo, con cada gesta.

Su victoria en la final de Roland Garros ante Novak Djokovic fue tan fulminante como extraordinaria. El mérito de su gesta no está en que sea su decimotercera Copa de los Mosqueteros, sino en que ganó por tres sets a cero al número uno del ranking mundial. Y todo ello con una versatilidad tenística desorbitante: con la derecha, con el revés, de volea, de saque directo, de fondo, en la red... Sencillamente espectacular.

Hay cosas que no cambia ni el coronavirus. Una de ellas es la cita anual de Rafa Nadal celebrando un título de Roland Garros, el torneo de tierra batida más importante del mundo. No hemos acostumbrado a sus hazañas, y se echarán de menos cuando este grande decida dejar el tenis profesional. El mordisco de Rafa a la Copa de los Mosqueteros se ha convertido en tradición, como ver a España quedar más atrás que el rabo en Eurovisión o tomarnos las uvas en Nochevieja. Pero no nos confundamos: que sea cotidiano no significa que sea fácil. Al contrario, es tan difícil mantener su nivel que Rafa ya es una leyenda viva del tenis por méritos propios. Como su compañero y amigo Roger Federer, con el que comparte la cima de los veinte grandes en toda su carrera. Ambos tan sencillos, ambos tan grandes. La historia del tenis la escriben ellos. Por eso solo puedo desear que esto se prolongue lo máximo posible. Si Rafa sonríe, España gana.